Un relato corto.

Estoy aquí y no se que hacer, estuve pesando en Rismond y el tiene un contrato para mi, lo llamare el jueves, por que el jueves es un mejor día para eso, de contratos, que mierda estoy haciendo ahora.
No dejare pasar las horas, ya es casi medio día, en la casa. Y aun no he desayunado, los platos de antes de ayer están en el lavado, hay hormigas.
La cama no la tiendo mas, solo la acomodo, es que no hay visita. Hace rato que no la veo. En realidad jamás la vi, eso creo que fue, lo que mas extraño de todo esto son los ruidos del computador al conversar con ella. Ton, tan, tun no se como son exactamente, solo se que me acurdo de eso. Hasta el jueves es mucho tiempo hoy es lunes, lunes primer día de la semana, o no, tal vez es el segundo día de la semana, tal vez el domingo es el primero y el sábado acaba la semana, la cosa es que es lunes y debo esperar hasta el jueves, y el jueves que día seria de la semana, no lo se a ciencia cierta y no importa, llamare ahora para lo de Rismond y ver ese contrato.